Barrio de la Madalena, 17 de junio de 2016.
Pregón, XXIX Semana Cultural.
Conchi Arnal.
Si pienso en el barrio de la Madalena, siento libertad.
Si pienso en rincons d’iste vico, fa ulor a cultura, alianza, luita y resistencia.
Si pienso en estas calles antiguamente amuralladas, saboreo la presencia de lucha política, poniendo en el centro a su gente y a su entorno.
Si pienso en un barrio que construye desde abajo tejiendo redes horizontales, maquinando lugares de seguridad, ése es la Madalena.
Decido vivir aquí porque es un barrio que acoge y cuida, donde conviven las disidencias, las alegrías y los placeres, siempre abierto a la respuesta, que no silencia ni invisilibiza.
Habito este barrio porque su gente facilita vidas más vivibles, porque sonríe al cierzo y a la niebla con cultura de barrio, porque no habla de revolución, sino que la hace.
Transitar este barrio es aire fresco. Es sentirse de un lugar, es encontrar una familia. La Madalena significa moverme segura y orgullosa. Si pienso en este barrio, siento que es el lugar para el diferente.
Hoy, comienza la Semana Cultural. 29 años construyendo COMÚN a través de sus vecinas y vecinos, sus comercios, sus colectivos y sus bares. Sumando con alegría para hacer comunidad. Casi 30 años jugando entre todas con la historia, la cultura, la política y la fiesta.
La Semana Cultural llena el barrio de rebeldía, porque la Madalena es mestiza y transfeminista, es precaria y alegre, activista, ciclista y anticapitalista, charra y chila en aragonés, niña, joven o abuela, dispersa y diversa, se hace gata, perra o gallo, lucha por sus árboles y disfruta de que se llenen sus calles de comidas populares y de música. La Madalena hace la calle, por eso no quiere los bancos de los de arriba, quiere los bancos para sentarnos.
En estos días, el barrio de la Madalena, late aún con fuerza, no se para, se mueve cual diapasón. Estamos invitadas a soñar, disfrutar y compartir la vida en la calle. El barrio y sus fiestas son tuyas, mías, de ellas, de todas y de ninguna. Celebramos que son 29 años haciendo un nosotras, reapropiándonos del espacio público desde lo festivo y reinvidicativo. Vente a la Semana Cultural, haz tuya las calles.
Pero ATENCIÓN:
«Se hace saber que, en el barrio de la Madalena, toda aquella persona que falte al respeto a las mujeres o al diferente no será bienvenida»
Nuestra Semana Cultural es el reflejo de la diversidad. Su espíritu no es otro que «entender el mundo de otra manera», o como escribiera Jorge Riechmann:
«Desear que siga existiendo el mundo para que siga existiendo toda la belleza del mundo, es una ingenuidad a la que no renunciamos»
¡¡Viva la Madalena!! ¡¡Vivan sus fiestas!!
¡Vivan sus bancos para sentarse su gente, en su barrio y en sus calles!
¡Viva la Semana Cultural de la Madalena!
¡Entalto a Semana Cultural d’a Madalena!